TRABAJO COLABORATIVO 2
CONVIVENCIA Y EXPRESIONES CULTURALES
PRESENTADO POR:
MARTÍN OYOLA
MARTÍN OYOLA
ZULIMA CONSTAN ZA GONZALEZ
GIOVANNY MEDRANO BANQUETH
JORGE ELIECER DAVILA
GRUPO: 207014_13
TUTOR
JACOB VARGAS
UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA (UNAD)
ESCUELA DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
NOVIEMBRE 2013
INTRODUCCIÓN
El presente trabajo recoge los argumentos expuestos, entorno a los derechos
humanos y la convivencia en Colombia, es producto de los aportes individuales de
los integrantes del curso de convivencia y experiencias culturales. El escrito da
cuenta en un primer momento de la síntesis conceptual del capítulo 1 de la unidad
2 del módulo, a través de un cuadro sinóptico que describe las características
temáticas de: Expresión humanística y científica, Impacto de las expresiones
culturales, Convivencia, y Valores principios y convicciones, en este mismo
orden, se detalla y define desde la postura grupal, que se entiende por derechos
humanos, como estos son garantizados o no en nuestro país, anotando en efecto
que estos, no son valorados de acuerdo con lo descrito por la leyes o tratados,
acto seguido se, elabora un discurso consecuente, dirigido a definir que es
convivencia, esta es vista como la garantía de los derechos, por tanto en nuestro
contexto nacional, falta propiciar escenarios de convivencia y garantía de los
derechos, esto ocurre porque desde la administración gubernamental, no se
evidencia una clara intención de mejorar y garantizar estas dos condiciones
necesarias para construir una sociedad justa, proponemos una alternativa, dirigida
a generar disposición y acción en la gente para que procure soluciones
consensuadas, exija y elija mejores gobernantes, en último término, planteamos
una conclusión en la cual, definimos como las expresiones culturales, en tanto
constructo moral, en tanto creación espiritual y material del hombre, deben ser el
contexto propicio para solucionar esta caótica realidad nacional.
OBJETIVOS
GENERAL
Comprender cuales son las condiciones en las que se encuentra el país en lo concernientes a los derechos humanos y las garantías que se dan entorno a la convivencia como condición que posibilita los derechos en la sociedad.
ESPECÍFICOS
Describir la importancia de las expresiones culturales en la construcción de escenarios precursores de principios morales para la convivencia.
Analizar las responsabilidades que asume el estado en la consolidación de la convivencia como fundamento en el que se respeten los derechos humanos.
Definir como las políticas de corte capitalista inciden en la perdida de las creaciones culturales y morales de un territorio.
Cuadro resumen de los capítulos 1 de la unidad 2, en el que se evidencie la diferencia de los conceptos centrales que aparecen al interior de cada una de las cinco lecciones.
ARGUMENTOS ENTORNO A LA IMPORTANCIA DELOS DERECHOS
HUMANOS Y LA CONVIVENCIA EN COLOMBIA.
“Los países libres son aquellos en los que son respetados los derechos del
hombre y donde las leyes, por consiguiente, son justas.”
• Maximilien Robespierre
Para iniciar este escrito se hace necesario tener claro primero que son derechos humanos, de acuerdo con la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos humanos estos “son inherentes a todos los seres humanos, sin distinción alguna de nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen nacional o étnico, color, religión,
lengua, o cualquier otra condición. Todos tenemos los mismos derechos humanos, sin discriminación alguna. Estos derechos son interrelacionados, interdependientes e indivisibles1”.
Este postulado sigue los lineamientos de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). El objetivo de esta declaración, compuesta por 30 artículos, es promover y potenciar el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales. Dicha declaración proclama los derechos personales, civiles, políticos, económicos, sociales y culturales del hombre, los cuales sólo se ven limitados por el reconocimiento de los derechos y libertades de los demás, así como por los requisitos de moralidad, orden público y bienestar general.
1 Tomado de: http://www.ohchr.org/Documents/Publications/PovertyStrategiessp.pdf
En este orden de ideas el respetar la condición del ser humano sin importar raza, credo, lengua y demás características diferenciadoras hace posible una mejor convivencia, pues al excluir a los seres humanos por alguna característica en especial genera malestar y fomenta la exclusión, en tal sentido, la importancia de
los derechos humanos depende del simple hecho que todos somos iguales y pertenecemos a una sociedad que aunque se encuentre dividida políticamente en países y estados sigue siendo una comunidad única en la cual todos tenemos una labor que cumplir para lograr el mejoramiento del mundo entero o por lo menos
evitar su destrucción. Es ante esta concepción donde debe primar el principio del respeto por el individuo como ser pensante, autónomo, creativo, heterogéneo y sobre todo valioso ya que la esencia principal de los derechos humanos radica en perdurar la vida en comunidad y hacerla menos problemática, sobre todo en el ámbito social que es el que nos muestra las fallas de la sociedad actual y las repercusiones que puedan tener en las generaciones futuras; para
evitar dichos problemas se crearon ciertas normas que protegen a todo hombre.
En nuestro país hablar de convivencia y derechos humanos, es complejo ya que estas dos estados parecen estar en oposición, en la práctica notamos como los derechos, que deben ser garantizados por el estado, no se cumplen, no existe un real interés gubernamental por consumar lo que en la constitución se dicta como
obligación, como ley. Estamos inmersos, en una realidad confusa, polarizada, en donde no parece haber un sendero clara, y en consecuencia nuestros derechos son poco contemplados, la crisis económica del campo, de los hospitales, de la educación, es vista por muchos como una catástrofe, para otros, la situación es cuestión de poco arrojo para salir adelante, visto desde arriba el sistema funciona. Muchos se enriquecen con esta catástrofe 2.
2 Canclini, N. culturas hibridas. Tomado de: http://agitadoresculturales.blogspot.com/2007/01/nstor-garca-
canclini-culturas-hbridas.html
¿Cómo hablar de derechos? ¿Cómo hablar de convivencia? ¿Cómo hablar de paz? Como bien dice William Ospina El verdadero nombre de la paz es dignidad de los ciudadanos, la confianza entre los ciudadanos, el afecto entre los ciudadanos. Y donde hay tanta desigualdad, y tanta discriminación, y tanto
desprecio por el pueblo, no puede haber paz. Allí donde no hay empleo difícilmente puede haber paz. Allí donde no hay educación verdadera, respetuosa y generosa, qué difícil que haya paz. Allí donde la salud es negocio, ¿cómo puede haber paz? Donde se talan sin conciencia los bosques, no puede haber paz, porque los árboles, que todo lo dan y casi nada piden, que nos dan el agua y el aire, son los seres más pacíficos que existen.
Donde los indígenas son acallados, donde son borradas sus culturas, donde es negada su memoria y su grandeza, ¿cómo puede haber paz? Donde los nietos de los esclavos todavía llegan con cadenas invisibles, todavía no son vistos como parte sagrada de la nación, ¿a qué podemos llamar paz?
La paz parece una palabra pero en realidad es un mundo. Un mundo de respeto, de generosidad, de oportunidades para todos.
La garantía de los derechos es letra muerta, una gran falacia, los discursos estatales de supuesto bienestar, son el escenario propicio para hipostasiar la fortuna de unos cuantos, y denigrar la postura de otros, y en este mismo andar siguen perpetuando la injusticia, nuestros gobernantes predican y aplica políticas
neoliberales, vendiendo lo que tenemos al mejor postor.3
3 Goyeneche, J. (2008) convivencia y expresiones culturales. Unad. Bogotá D.C pág. 44
4 Ibíd. 44-45
Por otro lado sus discursos, son incorrectos, lesionan la dignidad de los ciudadanos al declarar exabruptos como: “Meterle plata al Chocó es como meterle perfume a un bollo” dicha por Roberto Mesa, diputado de Antioquia. Al referirse a la comunidad gay el senador Gerlein dijo "Merece repulsión el catre compartido por dos varones, " es sexo sucio, asqueroso, sexo que merece repudio, Es un sexo excremental”. O el concejal de Bogotá cuando dijo “Que me manden una dama que le gusten los hombres, no que le gusten las mujeres porque eso sí no me gusta que me manden esas clases de mujerzuelas”.
Estos discursos discriminatorios, irrespetuosos, dan cuenta del tipo de gobernantes que tenemos, y por tanto mientras sigan dirigiendo, los derechos serán una utopía, la convivencia una quimera y las expresiones culturales como senario normativo de los grupos serán cercenados, para imponer modelos de
conducta, estructuras económicas, lógicas de educación que distan de nuestra realidad. Ahora bien, frente a esta realidad es necesario asumir una postura, dejar de ser apolíticos y en consecuencia pasivos, ser activos y conocedores de nuestra realidad para procurar cambiarla, Para fraguar este anhelo se debe empezar por respetar lo que define, a cada sujeto a cada grupo, el universo de significaciones, que en primera y última instancia caracteriza a un pueblo, las expresiones culturales, las cuales contienen un acervo moral y ético con el cual tomamos posturas, políticas, religiosas, educativas4, entre muchas otras. Son un camino adecuado para pensar en la paz.
CONCLUSIÓN
Nuestra realidad nacional ha estado determinada, por una contante tendencia homogenizadora, con la cual los que se dicen dueños del mundo los dueños del mundo, de las naciones, erradican culturas, cercenan costumbres y subvaloran la heterogénea esencia del hombre de su cultura de pensamiento de cosmovisión. Es necesario ir en búsqueda de una situación más positiva, que nos deje ser y nos libere de estas ataduras, en donde podamos convivir, ya que la convivencia es el tratado ético y moral que rige a una comunidad y la hace singular, es la aplicación de ese referente filosófico, es el andamiaje de acciones precisas que los miembros de la comunidad ejercen para hacer valer todas sus convicciones, para hacer valer los derechos individuales y para edificar el bien colectivo, en tal sentido, para hablar de derechos en nuestro país es necesario acortar la inmensa brecha que históricamente ha existido, solo así podremos convivir juntos, respetando la formas de ser de todos sin distinción, esto sucederá cuando elijamos gobernantes sabios, con sentido social que valore a su patria y a sus hermanos colombianos, cuando nuestras manifestaciones culturales, aquellas que nos definen sean la garantía para consolidar y garantizar los lineamientos de la carta magna de la construcción social en para garantizar la permanencia y evolución de cualquier estructura social.
BIBLIOGRAFÍA
Goyeneche, J. (2008) convivencia y expresiones culturales. Unad. Bogotá
Ospina, w (2009) ¿Dónde está la franja amarilla? Norma. Bogotá. D-C
Canclini, N. culturas hibridas. en: http://agitadoresculturales.blogspot.com/2007/01/